MEDICINA ESTÉTICA FACIAL
TOTAL FULL FACE
FULL FACE. Rejuvenecimiento FACIAL SIN CIRUGÍA
Full Face o Total Face es un tratamiento integral de rejuvenecimiento sin cirugía a base de ácido hialurónico que mejora notablemente la piel y estructuras faciales.
Aporta un aspecto terso y luminoso al rostro de forma eficaz, duradera y sin riesgos, abordando las diversas imperfecciones que aparecen como consecuencia del envejecimiento natural de la piel y de la exposición solar.
Sabemos que, con el paso del tiempo, la piel pierde elasticidad, hidratación, volumen y aparecen arrugas, bolsas, ojeras o marcas muy destacadas. Para ello, el tratamiento Full Face es perfecto, ya que permite revertir los signos del envejecimiento y darle al rostro un aspecto más saludable de manera muy natural.
¿En qué consiste el tratamiento Total Full Face?
Debido al paso de los años, nuestra piel va perdiendo fibras de colágeno y elastina, haciendo que se vuelva menos elástica.
A su vez, otras zonas se atrofian y van perdiendo volumen, como las almohadillas adiposas que dan sostén a la cara, conocidas como la redondez de la juventud. Esto provoca que el pómulo se vacíe, marcando la ojera y formando pliegues nasolabiales y en el surco nasogeniano. El hueso también sufre una atrofia, modificando el ángulo mandibular y el mentón, que da paso a una mayor flacidez y descolgamiento en el rostro. Todo ello consigue que se pierda la definición del óvalo facial.
Full Face es un procedimiento médico-estético muy demandado tanto por hombres como por mujeres que buscan eliminar los signos del envejecimiento facial de forma integral.
- El objetivo principal de este tratamiento es cuidar de manera uniforme toda la piel del rostro y reposicionar los volúmenes perdidos, a través de pequeñas microinyecciones de ácido hialurónico en puntos clave de la cara. De este modo, se consigue un resultado mucho más natural y homogéneo sin cirugía alguna, evitando que afecte a la rutina diaria del paciente gracias a su recuperación inmediata.
¿Qué se corrige mediante este tratamiento?
Corregimos el aspecto cansado, triste, enfadado, apagado, sin luz, que se da con el paso del tiempo. Nos hace gustarnos más, sentirnos bien, guapos, atractivos y joviales, devolviendo la vitalidad al rostro sin perder la expresividad y naturalidad.
Gracias al ácido hialurónico, clave en el rejuvenecimiento facial, podemos devolver la elasticidad, rellenar los surcos, retensar, redensificar e hidratar los ligamentos de sujeción facial o puntos de apoyo, reposicionar los volúmenes naturales de la cara que se han ido perdiendo y deteriorando con la edad e, incluso, en jóvenes recuperamos la atrofia malar producida por el ejercicio intenso.
Por tanto, este tratamiento está indicado para tratar y eliminar el aspecto cansado que dan al rostro ojeras y bolsas, la flacidez facial, pómulos, relleno de labios, líneas de marioneta o mentón. Recuperamos en la cara femenina el triángulo de la juventud y marcamos en el hombre los rasgos de masculinización. Las arrugas y líneas de expresión que aparecen con el tiempo, como las patas de gallo o el entrecejo, también las podemos corregir con la aplicación de toxina botulínica.
¿Cómo se lleva a cabo el procedimiento?
Trabajamos las distintas las causas del proceso de envejecimiento con técnica multicapa, por compartimentos.
Una vez se ha decidido dar el paso, lo primero que se realiza es un escáner del área facial, marcando aquellas zonas en las que se va a trabajar. Para ello, se señalan los diferentes puntos lifting, es decir, los puntos concretos donde se inyectará el relleno facial a base de ácido hialurónico. Estas áreas están debidamente estudiadas para que el procedimiento se lleve a cabo en base a las expresiones naturales del rostro y así, obtener un resultado óptimo.
Una vez tenemos claros estos puntos, se procede a rellenar de ácido hialurónico los pómulos, realzándolos para que ocupen su lugar natural dentro de la cara. Asimismo, se rellenan las arrugas faciales y se procede a hidratar, redefinir y rellenar los labios, además de otras áreas como la nariz, el mentón o los ángulos faciales, según las necesidades de cada persona.
Por último, se tratan el resto de las áreas, como la frente o el entrecejo, para acabar con una sensación de piel tersa y efecto flash, pero con resultados mucho más duraderos.
El tratamiento se lleva a cabo en la propia clínica, y no es necesaria baja médica, ya que la intervención es rápida y sin ningún tipo de molestia posterior.
Resultados del tratamiento Total Full Face
Este tratamiento facial de rejuvenecimiento sin cirugía garantiza un rostro cuidado, hidratado, terso y luminoso, conservando la expresión y naturalidad de las facciones sin necesidad de pasar por quirófano o intervenciones más complejas. Mejora del aspecto, la firmeza cutánea y el volumen facial, recuperando los relieves y puntos de luz.
Gracias a las microinyecciones de ácido hialurónico en la cara, se devuelve al rostro la vitalidad y frescura que el tiempo había hecho desaparecer.
Precauciones post-tratamiento
Después de realizar el tratamiento Total Full Face con ácido hialurónico, se puede continuar con la rutina diaria de forma totalmente normal. No obstante, se recomienda evitar masajear o tocar la zona tratada, así como evitar la prolongada exposición al sol, sobre todo en las principales horas del día, y proteger la piel de forma adecuada.
Realiza tu tratamiento de rejuvenecimiento facial en Clínica Manzanares
Si estás pensando en realizarte un tratamiento Total Full Face para rejuvenecer la piel del rostro sin cirugía en Alicante, lo mejor es que te pongas en manos de un médico estético especialista. De esta manera, te asegurarás de que el procedimiento se lleve a cabo con la máxima garantía de satisfacción.
Con más de 30 años de experiencia en el sector, en Clínica Manzanares contamos con los tratamientos más innovadores y revolucionarios de la medicina estética actual, haciendo que los pacientes queden totalmente satisfechos y contentos con los resultados. Además, el servicio que brinda la Doctora Virginia Martín es personalizado y cercano, teniendo siempre en cuenta la historia clínica del paciente, antecedentes estéticos, necesidades y expectativas, para optimizar los resultados deseados.